Tejados y paredes destrozadas, coches abollados y con lunas rotas, fachadas con desperfectos, árboles caídos y materiales volando como claraboyas, contenedores, papeleras, cristales y tejas, fueron algunas de las consecuencias sufridas por el tornado de aire que alrededor de las 17 horas sorprendía ayer a los vecinos de Quintana de la Serena.