transportes, La Serena
os conductores de autobuses de Lisetur se han declarado en huelga los jueves y viernes de cada semana hasta el 31 de diciembre de este año. Esta decisión fue tomada después de las fallidas negociaciones con la empresa, con sede en Villanueva de la Serena, según declara Eduardo Franco, del Sindicato Extremeño, convocante de la huelga. Sin embargo, Antonio Reseco, gerente de Lisetur, señaló ayer a este diario, que sólo hay desacuerdo en el precio de las horas presenciales de los conductores, puesto que se les concederá la antiguedad correspondiente a cada uno, y se han pagado los atrasos. Sin embargo, Franco denuncia que los trabajadores están sufriendo amenazas de despido. Incluso uno de ellos, José Alejandro Sierra, ha presentado su baja voluntaria de la empresa alegando "amenazas y acosos del encargado para que no acuda a la huelga". Amenazas que Reseco negó ayer con rotundidad. Por otro lado, hay otros dos trabajadores que han sido despedidos y que están pendientes de juicio con la empresa. Este juicio se celebrará el próximo 25 de septiembre en el Juzgado de lo Social de Badajoz. Sobre este asunto el gerente prefirió esperar el dictamen del juez. Las reivindicaciones prioritarias de los trabajadores son las concernientes a la seguridad. EL PERIODICO habló ayer con 3 empleados que no quisieron que se publicarán sus nombres por temor a represalias. Aseguraron que los vehículos no están en condiciones de circular, sufren continuas averías y provocan retrasos de horarios. Estos hechos los negó Reseco, señalando que todos habían pasado la ITV. De igual modo, son numerosas las reclamaciones presentadas por los viajeros que utilizan esta empresa. Procedentes de localidades como El Torviscal o Palazuelo, califican los autobuses de "camión de la basura", "coche de los Picapiedra" o "de cuando la guerra civil". Todos coinciden en denunciar la falta de aire acondicionado y calefacción, impuntualidad e incumplimiento de la línea.
