Campanario, Colegio Virgen de Piedraescrita, 2010
«Un niño le dijo el martes a la profesora si podía correr la mesa donde estaba, porque al pobre le estaban cayendo las gotas en la cabeza». Este hecho, que contaba ayer una madre en un corrillo, no fue sino el preludio de lo que al final acabó pasando ayer: un centenar de alumnos de infantil del colegio "Nuestra Señora de Piedraescrita" de Campanario no entraron a clase tras desprenderse parcialmente el techo de un aula a consecuencia de las goteras. El colegio de Campanario tiene matriculados a 429 alumnos, repartidos en tres edificios diferentes. Y en el centro donde se dan las clases de infantil, y que acoge a 137 escolares de 3,4 y 5 años, las goteras, la humedad y los desperfectos son patentes desde hace tiempo. Los focos de iluminación del pasillo han cedido del falso techo de escayola ya que se encontraban llenos de agua. Además, debido a la humedad, la mayor parte de la instalación eléctrica se encuentra en contacto con el agua, por lo que los diferenciales saltan continuamente. Desde la reanudación de las clases en 2010, el colegio se encontraba sin calefacción hasta ayer y cuando llueve, los niños no pueden salir al patio pues éste queda encharcado. Aunque las goteras empezaron a caer el pasado lunes, fue de madrugada cuando se produjeron los desprendimientos del techo. Unos hechos, como afirmaba ayer Estefanía Elices, miembro de la asociación de padres, que ha sido «la gota que ha colmado el vaso». Elices explica que los tres edificios que tiene el colegio están fatal, con grietas, barreras arquitectónicas y problemas de calefacción. «Lo único que se ha estado haciendo hasta ahora es parchear». Ante esta situación, la Ampa ha convocado para hoy jueves, a las 9.00, una concentración a las puertas del centro escolar y ha realizado un llamamiento para que ningún alumno acuda a clase. Los padres vienen reclamando en los últimos años a la Consejería de Educación la construcción de un colegio nuevo. De hecho, a principios de curso remitieron a la Consejería más de 2.000 firmas para que se haga el nuevo centro, ya que uno de los tres edificios data de los años 60. La Junta emitió ayer un comunicado en el que afirma que reparará el techo del aula, de cuyo derrumbe parcial culpa al Ayuntamiento «por no realizar los trabajos de mantenimiento». El Consistorio, además de apoyar el nuevo colegio, se defiende indicando que estos trabajos son competencia de la Junta. Además, aclara que en esta legislatura se han hecho más labores de mantenimiento que nunca.
