Quintana de la Serena
La joven Encarnación Carmona González, de 26 años de edad, desaparecida en Quintana de la Serena el pasado sábado continúa en paradero desconocido tras intensas labores de búsqueda durante toda la jornada de ayer lunes. Encarni o Nani, como es conocida en su entorno más cercano, desapareció de su domicilio en Quintana de la Serena el pasado sábado 7 de julio. La madre de la joven, María Teresa González Lobo, de 49 años, denunció en la tarde del sábado la desaparición de su hija que padece una discapacidad psíquica. Encarnación Carmona González es de complexión delgada y mide 1,52 centímetros de estatura. En el momento de su desaparición vestía una blusa amarilla, falda corta rosa y zapatillas de color azul. Es la mayor de tres hermanos. Junto a su familia reside en Ciudad Real, pero suele pasar sus vacaciones y fines de semana en Quintana. Desde el pasado sábado hay montado en Quintana de la Serena y sus alrededores un amplio dispositivo de búsqueda. Todo el mundo se ha sensibilizado, según señaló ayer el alcalde, Juan Manzano. Participa en la búsqueda un grupo de perros de Extremadura, así como una veintena de agentes pertenecientes al Servicio Rural de la Guardia Civil que desarrollan labores de rastreo en las inmediaciones donde se produjo la desaparición. También intervienen guardias civiles del Seprona y del Servicio de la Policía Judicial de la Comandancia encargados de las gestiones de investigación sobre el suceso. En las labores de rastreo están interviniendo un helicóptero procedente de Sevilla y las unidades subacuáticas que han reconocido unas charcas próximas al lugar de los hechos, sin resultados hasta el momento. Asimismo, cabe destacar la colaboración de Cruz Roja y Protección Civil. Tras la gran movilización de búsqueda llevada a cabo el pasado domingo, ayer alrededor de 300 vecinos no solo de Quintana, sino llegados de otras localidades limítrofes, peinaron los alrededores de la población sin resultado. Por la mañana, desde temprana hora comenzó la batida en el propio casco urbano y en el campo. Al mediodía se interrumpió la labor de rastreo y sobre las cinco y media de la tarde se reanudó el trabajo. El dispositivo establecido por la Capitanía de la Guardia Civil dividió Quintana y sus alrededores en cuatro zonas. A cada zona se asignaron varios agentes de la Guardia Civil para coordinar a los vecinos. Como apoyo logístico, en cada área se sumó un vehículo de Cruz Roja para abastecer de agua a los voluntarios y coordinar las comunicaciones entre los grupos. De esta forma se peinaron palmo a palmo los alrededores con un radio de tres kilómetros. Reanudación Las labores con ayuda ciudadana cesaron al anochecer. No obstante, durante la noche la Guardia Civil siguió en alerta. Está previsto que hoy, a primerísima hora de la mañana, se reanuden los trabajos de rastreo a cargo de vecinos. Francisco Gómez Morales, capitán de la Guardia Civil al mando de la operación de búsqueda, manifestó que no se descarta ninguna hipótesis, incluso que la joven haya tenido un pequeño accidente y se haya desorientado por alguna caída. En este sentido, Gómez Morales apuntó que «el terreno cercano al del lugar donde se pierde la pista de la joven es difícil, con gran número de pozos y alcantarillas». El responsable de la Benemérita sigue reclamando la colaboración ciudadana e incluso ha asegurado que hay contactos con la Guardia Civil de Ciudad Real, localidad de donde procede la familia de Encarnación, por si existiese alguna pista al respecto en aquella población. Durante la tarde del lunes llegaron al cuartel de la Guardia Civil de Quintana de la Serena varias falsas alarmas que hablaban del hallazgo de personas ataviadas con ropas similares a las de Encarnación. Se desechó la veracidad de todas ellas. Al finalizar la jornada se personó en Quintana de la Serena la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, quien visitó el domicilio familiar de Encarnación. En los alrededores de la casa se congregaron decenas de vecinos que solicitaron que continuasen las labores de búsqueda e incluso sugirieron la colaboración del Ejército.