Ni la búsqueda de un corralón , ni las miles de horas de trabajo que conllevan la confección de las carrozas de Piedraescrita , detienen la pasión de los campanarienses en la producción de las obras de arte e ingeniería popular que mañana desfilarán hasta la ermita. Los primeros datos que se tienen de la romería de la Virgen de Piedraescrita datan del año 1595 por un escritor del Visitador Villafuerte en el recrimina al Concejo de Campanario no tener licencia para gastar una parte de las rentas en la misma.