Castuera
El último accidente de tráfico registrado el pasado lunes, cuando el vehículo que transportaba a cinco jóvenes de Don Benito se empotraba en una arqueta, ha vuelto a poner de actualidad el deficiente estado de la carretera Ex-346 que comunica Don Benito con Quintana de la Serena. Estos 37 kilómetros, en cuyo trayecto se pasa por las localidades de La Haba y La Guarda, tienen un amplio historial de accidentes de tráfico. Así lo avalan los abundantes restos de vehículos que se pueden ver en las cunetas y algunas cruces con flores clavadas por familiares en los lugares en los que perdieron a algún ser querido. La carretera tiene un firme bastante deteriorado y una sucesión interminable de curvas, especialmente en el tramo entre La Haba y La Guarda, donde también persiste un puente muy estrecho. La mencionada carretera tampoco tiene arcenes. Tener una pequeña avería que nos obligue a parar es arriesgarnos a algo más, dado los cambios de rasante que existen. Además, la carretera sirve de vía de comunicación para muchos vehículos pesados que transportan granito de Quintana. Los nueve kilómetros que unen Don Benito con La Haba no son de los peores, aunque cabe destacar varias curvas peligrosas, sin quitamiedos. En este tramo perdió la vida el pasado 3 de enero Manuel Cabanillas, un joven trabajador de Don Benito cuando regresaba a su domicilio al colisionar su Seat Toledo con otro turismo. Al llegar a La Haba, el conductor se topa con el cruce de entrada a la población y de dirección a Villanueva de la Serena. Se trata de un cruce muy peligroso, especialmente por la noche, dado que las líneas pintadas en la calzada apenas se ven. Tras atravesar La Haba comienza el listado de curvas. Apenas se sale de este pueblo hay una en la que hace año y medio, el 8 de octubre de 2005, perdió la vida una mujer de Zalamea de la Serena que viajaba junto a su hijo. El vehículo en el que circulaban ambas personas, se salió de la carretera en una curva y volcó tras impactar contra un olivo. Prácticamente en el mismo sitio, en el kilómetro 10,100, el pasado 16 de noviembre resultaba herida otra persona, aunque de carácter leve, en parecidas circunstancias, al salirse de la vía. En este caso fue una furgoneta Citroen C-15. Solamente 900 metros después tuvo lugar el último de los accidentes. En el fatídico kilómetro 11. Allí se truncaba el trayecto de Manuel, Vicente, Rafael, Guadalupe y Laura. Estos cinco jóvenes regresaban a Don Benito después de pasar el día en la Romería de la Antigua. Se desconocen las circunstancias, pero eran las diez de la noche y el vehículo en el que iban se salió en un tramo en el que hay cinco curvas consecutivas. Después de trazar una curva a la izquierda y dos muy seguidas y con desnivel a la derecha, se salieron en la cuarta, una curva que, aunque precedida de un pequeño tramo más recto, es bastante cerrada a la izquierda. Apenas habían recorrido tres kilómetros desde el acceso a la Ermita. La amiga se recupera Laura murió prácticamente en el acto. Su amiga Guadalupe se recupera afortunadamente tras permanecer varios días en la UCI del Hospital Infanta Cristina de Badajoz. Ayer estaba previsto que fuese trasladada ya a planta. Las vidas de los otros tres chavales tampoco corren peligro.
