Hasce sólo tres años un consejero de Sanidad de la Junta abvertía a las cooperativas ovinas de la comarca de La Serena que “me importa un pito tener que cerrar todas las queserías , si no tengo más remedio”. Hoy, en la jornada de clausura del Salón Ovino de Castuera, industriales vascos exhiben, y venden, sofisticadas queserías portátiles que se instalan, abligadas con paneles isotérmicos para mantener la leche a baja temperatura , en cualquier explotación ovina de esa añeja comarca de pastos. Los ganaderos ordeñan más a sus ovejas hasta el punto que se ha duplicado la producción de leche, y se acaba de inaugurar en Castuera una quesería artesana capaz de producir diariamente 1.200 kilos de queso, un queso que llega a venderse hasta 3.000 pesetas el kilo.