El embalse de La Serena, el mayor de España y segundo de Europa se ha convertido como consecuencia de las últimas lluvias caídas en el lugar de reunión de ciento de personas que durante los fines de semana rinden culto al agua tanto en las proximidades de la presa como junto a los grandes viaductos construidos a lo largo de las casi 14.000 Has, que componen el “mar de La Serena”. Hace tan sólo año y medio resultaba difícil pensar que los secos y grisáceos 100.000 metros cuadrados de cimentación de la superficie, de la presa quedarán en tan corto espacio de tiempo prácticamente cubiertos por el agua, sin embargo esta es la realidad. Por algo este gran embalse ocupa un lugar destacado en el Registro Mundial de Grandes Presas.