Hallan en un pozo el cuerpo de la joven desaparecida

Materia:

Quintana de la Serena

Resumen:

La desolación se apoderó ayer de la localidad pacense de Quintana de la Serena. A primera hora de la mañana un grupo de poceros y una pareja de la Guardia Civil encontró sin vida el cuerpo de Encarnación Carmona, la joven de 26 años con discapacidad intelectual que había desaparecido de la puerta de su casa hace una semana. Cientos de vecinos se agolparon en el camino paralelo a la huerta privada donde se había encontrado el cadáver, en un pozo y a tan solo 500 metros de la casa de la familia. Encarnación, Nani como era conocida por todos, fue encontrada flotando en uno de los pozos que sirve para el regadío de la huerta. No tenía signos de violencia. Era el tercer pozo que revisaban ayer tres poceros locales acompañados por una pareja de la Guardia Civil desplazada desde Monterrubio de la Serena. El enclave se ubica muy cerca de la antigua fábrica de harina, donde los perros perdían su pista. Por este motivo el lugar había sido registrado a diario e incluso ese mismo pozo había sido revisado dos días antes. OCULTA EN EL POZO El pozo en el que se ha encontrado a Nani tiene el brocal tapado con un palé de madera que ha permanecido intacto durante toda la semana, con una altura aproximada de un metro y una profundidad de seis. Su cuerpo se encontró en el hueco de la bomba de extracción, donde había tan sólo un escalón y en el que se habría escondido, según el informe dado a conocer por el capitán de la Guardia Civil encargado del dispositivo de búsqueda, Francisco Gómez Morales, del cuartel de Villanueva de la Serena Una de las primeras personas que vio el cadáver fue el alcalde de Quintana de la Serena, Juan Manzano que reconoció verla "muy natural, no se le ve deterioro alguno ni está hinchada, aunque lleve una semana en el agua". Alrededor de las nueve de la mañana aparecía en el lugar el padre de la joven, Inocente Carmona, cabizbajo pero entero. Tras pasar unos minutos en la finca, se marchó para volver acompañado de su otra hija y de su mujer, María Teresa González. Rota de dolor, entre lágrimas y gemidos, se lamentaba de la suerte que había tenido su hija repitiendo "mi niña, mira qué fin has tenido". En todo momento estuvo apoyada por una psicóloga de la Cruz Roja. LEVANTAMIENTO DEL CUERPO El cuerpo de Encarnación fue rescatado por una dotación de tres bomberos del parque comarcal de Castuera alrededor de las 11.30 horas, una vez que la policía judicial tomó fotografías e inspeccionó la zona, y el juez permitió el levantamiento del cadáver. El cabo Juan Pastor señaló que la tarea había sido sencilla, puesto que el lugar era accesible y sólo habían necesitado una escalera. Encarnación fue sacada del lugar por la puerta trasera de una casa existente en el huerto del fatal desenlace. Fuera esperaba un coche fúnebre que la trasladó al Hospital Comarcal Don Benito-Villanueva de la Serena, donde se le practicó la autopsia. Muy cerca de donde su hija había fallecido, Inocente y María Teresa mostraron su agradecimiento "más sincero" a toda la localidad de Quintana de la Serena y a los pueblos de la comarca que se han volcado en la búsqueda de su hija. Afecto que hicieron extensivo a las empresas y particulares que donaron agua y fruta para que los voluntarios repusieran fuerzas durante las tareas de búsqueda, así como a la Guardia Civil. Posteriormente ambos, más tranquilos, explicaron que velarían a su hija en el tanatorio de la localidad para, posteriormente, en torno a las seis de la mañana de hoy regresar a Ciudad Real, donde será enterrada. Una de las iglesias que los padres barajaban era la de La Merced, aunque todavía no habían decidido nada al respecto. Sin embargo, expresaron su deseo de organizar una misa en Quintana para responder al cariño de sus vecinos. Por último, Inocente, apesadumbrado, indicó su deseo de que acabara esta historia que tanto sufrimiento les ha provocado en la última semana, apuntando que “ojalá ya no se vuelva a hablar más de este caso”. MIL VOLUNTARIOS / Con la aparición del cuerpo de Encarnación Carmona, se puso fin a un dispositivo de búsqueda que ayer reunió a un millar de personas desde primera hora de la mañana. Fue el día de mayor afluencia de voluntarios. Todos fueron avisados rápidamente del triste hallazgo, que ponía fin a sus esperanzas de encontrar con vida a la joven. Los voluntarios desplazados ayer hasta Quintana procedían de diversos puntos de la comarca, algunos habían aprovechado el descanso del fin de semana para venir a ayudar y otros muchos llegaban incluso de Ciudad Real, donde residía habitualmente la familia de Encarnación Carmona González. Ayer de nuevo se volvió a peinar todo el perímetro de Quintana de la Serena en un radio de seis kilómetros, esta vez con la incorporación de 150 cazadores y c erc a de 30 c aballos y jinetes de la Peña Caballista de la localidad, así como equipos de paramotor de la asociación Extremados de Don Benito. Un gran despliegue de medios al que se unió la Guardia Civil con agentes desplazados desde toda la demarcación de Quintana, así como Badajoz y Cáceres, y Cruz Roja, que desplazó a una veintena de voluntarios de sus asambleas de Quintana, Badajoz, Don Benito y Castuera. Los esfuerzos para encontrar a Nani con vida fueron inútiles a pesar de la solidaridad y c olaboración mostrada por los vecinos, los voluntarios y todos los que han participado en las labores de búsqueda.

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