Quintana de la Serena, canteras
Días atrás, agentes de la Policía Nacional han detenido a 55 falsos vigilantes de seguridad que trabajaban sin la preparación necesaria, algunos de ellos incluso con antecedentes policiales y penales. Estos falsos vigilantes fueron contratados con titulaciones falsificadas y trabajaban como vigilantes de seguridad custodiando explosivos o incluso ejerciendo de escoltas privados para diferentes empresas. Ejercían sus funciones en obras y en una cantera en Quintana de la Serena, donde había material explosivo. Los falsos diplomas de formación en materia de seguridad privada que poseían estas personas llevaban todos ellos el anagrama de un centro de formación de Madrid donde se expedían, sin embargo la Policía Nacional dejó claro ayer que este centro no tenía nada que ver con estos hechos. Al parecer, un antiguo empleado, que conocía cómo funcionaba el centro, fue el encargado de falsificarlos y con la ayuda de una decena de intermediarios los vendía a un precio que oscilaba entre los 600 y los 1.800 euros. No obstante, no consta que haya habido "ningún tipo de irregularidad" en la ejecución de sus funciones, a pesar de que uno de los detenidos tenía antecedentes penales por un presunto delito de homicidio y se encontraba ya en prisión. La mayor parte de los detenidos son españoles y ciudadanos provenientes de Hispanoamérica y del norte de Africa que habían conseguido la nacionalidad española, aunque doce poseían la nacionalidad rumana de origen. A todos se les acusa de falsedad documental y de intrusismo. La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones o imputaciones por los mismos hechos.