La región extremeña posee una extensión de 42.000 kilómetros cuadrados, que brindan al visitante la posibilidad de recorrer hasta un total de 54 espacios naturales. El Parque Natural de Monfragüe, que mantiene una excelente conservación de la fauna y la flora, el Parque Natural de Cornalvo, donde ya los romanos aprovechaban las zonas húmedas, junto a la fauna, y la Reserva Nacional del Cíjara, buen ejemplo del cuidado y preservación de especies autóctonas, entre los numerosos espacios naturales de la región, son los máximos exponentes de la naturaleza en Extremadura. Son emblemas del entorno natural priviligiado que distingue a Extremadura y que le han valido el calificativo de “Pulmón Verde de Europa”.
