Quintana de la Serena
El cuerpo de Encarnación Carmona González fue hallado sin vida sobre las 8,30 horas de ayer en el interior de un pozo de riego, a escasos 500 metros del domicilio familiar, en Quintana de la Serena. Después de siete intensos días de búsqueda, el cadáver de esta joven fue encontrado por dos agentes de la Guardia Civil de Monterrubio de la Serena y cuatro poceros que colaboraban en las labores de rastreo. El hallazgo tuvo lugar en el corral de una finca privada conocida popularmente como de Eugenio Bichino. La autopsia practicada en el Hospital Comarcal Don Benito-Villanueva reveló que la joven murió de manera accidental, al no evidenciarse signo alguno de violencia. Encarnación Carmona González tenía 26 años, padecía una discapacidad psíquica y había desaparecido el pasado 7 de julio, sobre las cinco de la tarde. La joven había llegado de Ciudad Real, donde residía habitualmente junto a su familia, con la disposición de pasar el fin de semana en su casa de Quintana de la Serena. La Guardia Civil informó que la chica se ausentó de la puerta de su domicilio, se despistó y tras, presuntamente deambular durante un rato por los alrededores, se adentró en la mencionada parcela. Al parecer abrió una pequeña cadena que servía para sujetar un poco la puerta. Encarnación Carmona pudo refugiarse en la finca de Eugenio Bichino, a la sombra de unos olivos y probablemente cayó al pozo por desorientación o despiste. El alcalde de esta localidad, Juan Manzano, aseguró a HOY que el cuerpo había sido hallado flotando en el agua y que le había sorprendido el buen estado del mismo, pese a haber transcurrido ya una semana desde su desaparición. El lugar del hallazgo se encuentra muy cerca de la calle Reyes Católicos, donde residía Encarnación. Se trata de una parcela con olivos en la cual se halla este pozo de riego. La finca está habitada por un matrimonio mayor. Él tiene 90 años y su esposa 88. La finca de Eugenio Bichino se halla a escasos metros de la vieja fábrica de harina de Quintana, un lugar ampliamente rastreado por dos motivos: por la cercanía al domicilio familiar y por la gran cantidad de escondrijos que tiene. El pozo de riego donde se halló el cadáver es uno de los aproximadamente 400 de estas mismas características existentes en Quintana de la Serena. Este pozo en particular y otros de las inmediaciones habían sido investigados en días precedentes por idéntico motivo: su cercanía al domicilio familiar. La última vez que alguien vio con vida a Encarnación fue prácticamente en la puerta de su casa, cuando descargaba unas garrafas de agua del coche familiar. La desaparición tuvo lugar mientras su padres aguardaban en el interior del domicilio. Tras la localización del cadáver, fue acordonada inmediatamente la zona, personándose al instante el padre de Encarnación, Inocente Carmona, y la madre, María Teresa González, ésta última evidenciando muestras de dolor. El cuerpo fue extraído del agua por bomberos del parque de Castuera y posteriormente el juez procedió al levantamiento del cadáver, a la vez que se ordenó su traslado al Hospital Comarcal Don Benito-Villanueva para practicarle la autopsia. Tras el examen forense, el cadáver fue trasladado nuevamente a Quintana de la Serena, donde ayer se veló para su posterior regreso a Ciudad Real esta mañana. En este municipio se oficiará el funeral. El barrio del Carmen, donde residía Nani ha suspendido sus fiestas.
