Quintana de la Serena
El funeral por la joven Encarnación Carmona, que apareció el sábado muerta dentro de un pozo en Quintana de la Serena, se celebró ayer por la mañana en el tanatorio de La Guija de Ciudad Real, localidad natal de la joven. Cientos de personas quisieron rendir respeto a la joven y acompañar a sus padres y familiares en tan duro trance. El cuerpo sin vida de la joven ciudadreleña llegó a primera hora de la mañana al Tanatorio La Guija de Ciudad Real, donde a partir de las once y media de la mañana se ofició la misa funeral, que concluyó con un aplauso para Encarnación. Al sepelio asistieron cientos de personas, muchas de ellas jóvenes, debido a la edad de la fallecida y de sus hermanos, que quisieron acercarse hasta el tanatorio para dar el último adiós a Encarnación, aunque muchos de ellos tuvieron que quedarse fuera de la capilla, ya que estaba completamente llena. Entre los asistentes se encontraban también el delegado de Cultura de la Junta de Castilla-La Mancha, Angel López, y el delegado de Educación, José Fuentes, así como la alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, y la concejala Teresa Aguirre. También se acercaron a dar el último adiós a Encarnación un gran número de vecinos que querían despedir a la joven que tanta simpatía derrochaba por las calles que la vieron nacer, y de la que destacaron su carácter afable, sobre todo, con los niños. «La quería todo el mundo», señaló alguna de las vecinas de los portales colindantes al domicilio familiar, situado en la calle Caballeros. Solidaridad A pesar del fuerte calor que se vivió ayer en Ciudad Real, todos estuvieron pendientes de las palabras del sacerdote que ofició la misa, que en su homilía destacó la palabra solidaridad, una cualidad que han demostrado muchos vecinos de Quintana de la Serena y de Ciudad Real, quienes no dudaron en formar grupos de voluntarios para facilitar la búsqueda de la joven. De hecho, para el día en que fue hallado su cuerpo, estaba previsto que varios grupos salieran desde Ciudad Real para continuar y complementar las labores de búsqueda. Asimismo, el sacerdote recalcó la ayuda que la familia necesita en estos momentos y la que va a necesitar, por lo que pidió que cada uno intentara ofrecer ayuda para que puedan superar la tragedia de la mejor manera posible. Cuando finalizó la oración por el alma de Encarnación, los asistentes ofrecieron un emocionado aplauso a los familiares, tras los duros días que han pasado pendientes del desenlace de esta historia. El féretro salió sobre las doce y media de la mañana, entre un contenido y emocionado silencio de los asistentes. El coche fúnebre estaba cubierto por un gran número de coronas de flores, tanto de sus familiares, como de sus vecinos, así como de centros y numerosos ramos de flores. A continuación, se dirigieron al cementerio municipal, que se encuentra muy cerca del tanatorio, para dar el último adiós a la joven. Por otro lado, cabe destacar que las fiestas en honor a la Virgen del Carmen, que deberían haber empezado anoche quedaron suspendidas por la gran implicación de la familia con este barrio, en señal de respeto.