Con la tradicional celebración de la subasta oficial de ganado se clausuró ayer en Castuera la décima edición del Salón Ovino. Un montante de 10.400.000 pesetas fue la cantidad manejada en las transaciones comerciales efectuadas ayer en el marco de este certamen ferial. El director técnico de la Institución Ferial del Salón Ovino, Fermín López, destacó la importancia de tratarse de una subasta selectiva en la que ya queda concertada, entre criadores y ganaderos, sobre las calidades del ejemplar que entrará en subasta. Así mismo, esta edición incrementó el número de ganaderos asistentes a este evento, aún tratándose de una subasta específica del sector ovino. Un total de 400 cabezas fueron subastadas con una venta aproximada del 90 por ciento. Este volumen deriva en la cuantía de 10 millones de pesetas en los que participaba la Junta de Extremadura con una subvención de un millón de pesetas y el Salón Ovino con ayudas por valor de 1.800.000 pesetas.
