Iglesia Católica
Nació el 20 de abril de 1907 en Rollán, provincia y diócesis de Salamanca. Hijo legítimo de Pablo García Martín e Inocencia Cuadrado Calvo. Fue bautizado el día 3 de mayo con el nombre de José Luís. El 23 de julio del año 1918 recibe el sacramento de la confirmación de manos de D. Diego García Alcolea, obispo de Salamanca. Ingresó en el Seminario Menor de Salamanca el año 1918, en el que cursó tres cursos de Latín, de donde pasó después a la universidad Pontificia de Comillas, en Santander, para estudiar tres cursos de Gramática y Humanidades (1921-24); tres de Filosofía (1924-27) obteniendo el Grado de Licenciado y cuatro en la Facultad de Teología donde consigue el Grado de Bachiller en el año 1929. Don José Eguino y Trecu, obispo de Santander, imparte al SdD (Siervo de Dios) las órdenes sagradas: Tonsura y Menores; Subdiaconado el día 25 de marzo de 1931 en el seminario de Comillas; el Diaconado el día 31 de mayo de 1931 en Seminario diocesano de Monte Corbán y el Presbiterado el 24 de junio de 1931. Celebró la primera misa en su pueblo el día 18 de julio de 1931. Ministerio sacerdotal Fue capellán de las Religiosas Josefinas en Mérida, consiguiendo la excardinación por parte del Obispo de Salamanca el 31 de octubre de 1935 y la correspondiente incardinación a la diócesis de Badajoz el 16 de noviembre de 1935. El día 26 de marzo de 1936 es coadjutor de Campanario y cuatro meses después se encarga de la parroquia de Ntra. Sra. de la Asunción por ausencia del cura párroco don Antonio Manzano Garías, que se hallaba de vacaciones con unos familiares en el pueblo de Cabeza la Vaca. Martirio y sepultura Fue detenido en los primeros días del inicio de la contienda, en julio de 1936. Todos sus verdugos y testigos quedaban admirados de su fortaleza y buen humor. El Obispo de Badajoz, Don José María Alcaraz y Alenda, expresa por escrito, en relación a la ejecución del Siervo de Dios: "lo apaleaban varias veces al día, obligándolo a hacer trabajos para él dificilísimos, como limpiar cuadras y evacuatorios; atado a un árbol del convento, convertido en cárcel, arrojaban sobre él macetas y cuantos objetos hallaban a mano, y atado al árbol, pasó alguna noche tendido en el suelo, con las heridas manando sangre; sin quejarse ni dar muestras de impaciencia, siempre con semblante alegre y risueño, exhortando y animando a sus compañeros de prisión que estaban admirados de la resignación y fortaleza con que sobrellevaba su martirio, hasta el día 29 de octubre, en que fue llevado en camioneta al cementerio en donde fue fusilado con otros varios, a los que, según rumor, se les obligó a hacer la instrucción y la hicieron, pero D. José Luis no pudo hacerla porque no podía tenerse en pie, pues según aseguran, le habían roto a palos la espina dorsal y algunas costillas. Tendido en el suelo fue muerto de un tiro mientras sus compañeros hacían la instrucción momentos antes de morir también". Sus restos mortales reposan en la cripta construida ex profeso en la capilla del cementerio de Campanario.
Contiene una fotografía, dónde aparece la imagen de José Luis García Cuadrado