campo de concentración de prisioneros, Castuera
La Consejería de Cultura y Turismo pretende declarar como Bien de Interés Cultural el campo de concentración de Castuera. La noticia ha sido acogida favorablemente por el Ayuntamiento de la localidad y por la Asociación Memorial Campo de Concentración, uno de los colectivos que más ha profundizado en la investigación de este espacio de represión franquista. El anuncio del Gobierno regional disipa la amenaza que ha planteado la posible construcción de una planta de energía fotovoltaica en los terrenos del mencionado campo. Según la Administración regional, se adoptarán las medidas oportunas dirigidas a preservar la zona donde se ubica el campo de concentración (la Mina de la Gamonita) y algunas estructuras arqueológicas, además de establecerse una zona de seguridad de 200 metros alrededor del perímetro descrito. El alcalde de Castuera, Francisco Martos, señala que «el hecho de que el campo se declare bien de Interés Cultural nos llena de satisfacción». Sobre la referida polémica, Martos añade que «para la mayoría de ciudadanos de Castuera este anuncio es un descanso y ya no habrá más peleas con este tema, pues entre los vecinos de Castuera se sabe que es un lugar, valga el término, sagrado». El Ayuntamiento de Castuera ha informado a la Junta de Extremadura de que cuenta con el compromiso escrito de la empresa Fotones de Castuera, impulsora del mencionado proyecto energético, de no ubicar la planta fotovoltaica en la zona delimitada del campo de concentración. Es más, la propia empresa ha mostrado su intención de apoyar la creación de un centro de interpretación en esta zona. Permanecer impasible Con esta declaración, la Consejería de Cultura y Turismo se reafirma en su apuesta por el proyecto de recuperación de la memoria histórica en Extremadura y recuerda que «no ha permanecido ni permanecerá impasible ante cualquier actuación que pudiera poner en peligro la conservación de un lugar como el campo de concentración de Castuera». Antonio López, miembro de la Asociación Memorial Campo de Concentración y autor de un libro de investigación sobre este lugar, informa que el de Castuera forma parte de la red de prisiones y campos del régimen franquista, que varía según el avance de la Posguerra. Tras su cierre en marzo de 1940, algunos prisioneros son trasladados a la cárcel de Herrera del Duque. De su estructura solo queda el foso perimetral y el asiento de los barracones, así como una plataforma de cemento donde se ubicaba una cruz. También hay restos de los lavaderos y de las letrinas, según apunta López.