Cinco cañadas reales atraviesan Extremadura de Sur a Norte, o de Norte a Sur, desde tiempos inmemoriales. Algunas de estas cañadas toman nombres diferentes al llegar a una o otra provincia. Otras se juntan o confluyen en determinados puntos. Además de esta amplia red de cañadas, que en algunos tramos llegan a tener centenares de metros de anchura, hay una tupida red de veredas y cordeles. El primer trazado que la Junta desea rescatar para su uso público es la conexión de las ciudades de Badajoz y Cácedes.